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Trump, Cuba y los ‘Ataques Sónicos:’ Conversando con Fernando Ravsberg

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Escrito por R. O. NiederstrasserAnalista del Consejo de Asuntos Hemisféricos

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Fernando Ravsberg es un periodista uruguayo. Llegó a Cuba en 1990, para cubrir lo que ocurriría en la isla tras la caída del mundo socialista europeo, en particular, la desaparición de la Unión Soviética. Hasta el 2014 trabajó como corresponsal de la BBC, además de colaborar con la cadena Telemundo, Tv Azteca y Radio Nacional de Suecia y trabajó para el periódico español Público. Hace 10 años creó el blog Cartas desde Cuba dentro de la BBC para poder tocar temas informativos pero no noticiosos. Desde el 2014, con sus propios recursos, ha superado el número de visitas que tenía, convirtiéndose en una de las personas más leídas en la isla y en más de 100 países, incluyendo lugares como Japón.

 

COHA ¿Qué cambios ha visto Ud. en la vida cotidiana cubana después de las normalizaciones con el gobierno de Obama y las reformas de Raúl Castro?

Ravsberg En realidad los cambios que se venían produciendo en Cuba son anteriores al 17D. No corresponden a una negociación sino a la necesidad urgente de la economía de sustentar las necesidades del país. La política de Obama facilitó que los reformistas, encabezados por Raúl Castro, pudieran avanzar sin que los “inmovilistas” sacaran del baúl el fantasma del enemigo acechando para colarse por las grietas que abren los cambios. La llegada de Trump al poder ha cambiado la correlación de fuerzas interna dentro del gobierno, dando un mayor espacio a los inmovilistas. Eso se ha visto reflejado en el freno de los cambios, a través de la suspensión de trabajos por cuenta propia o la congelación de la apertura de las pequeñas y medianas empresas (PYMES), por ejemplo. Esto último demuestra que la “Era Obama” había facilitado el proceso de cambios que venía desarrollando el gobierno cubano, creando un ambiente externo menos agresivo y por ende, restando argumentos a los inmovilistas, los cuales utilizan la amenaza extranjera como argumento fundamental de su conservadurismo.

COHA Todo parecía que Cuba y E.E.U.U. iban rumbo a la normalización completa al final de la administración de Obama, con diversos analistas prediciendo que, con una posible presidencia de Clinton y una campaña de lobby, se podría incluso eliminar el bloqueo. ¿Cuáles han sido los cambios más fundamentales hacia Cuba después de la sorpresiva victoria de Donald Trump?

Ravsberg El problema del “legado” de Obama en el tema Cuba es que era un castillo de naipes sin pegamento, bastaba un soplido para derribarlo. Trump ha ido creando más que nada un “estado de ánimo” que afecta colateralmente las relaciones bilaterales. No renuncia al acuerdo migratorio de 1995, pero saca de Cuba al personal que entrega las visas. No prohíbe el turismo, pero advierte a los estadounidenses sobre el peligro de ser atacados con armas sónicas si visitan la isla. No bloquea a las aerolíneas, pero al reducir el tráfico hace inviable el mantener la ruta. Todo esto está provocando el regreso a la mentalidad de “plaza sitiada”, la misma que sirvió durante décadas para enfrentar los embates de EEUU (embargo, organización de invasiones, abastecimientos de grupos armados, atentados contra dirigentes, etc.). El problema es que esa estrategia no deja lugar a pensar diferente, por lo que es posible que los espacios que se habían abierto (publicaciones digitales, laboratorios de ideas, debate en general) comienzan a cerrarse. El sector más afectado será el de los emprendedores, porque la campaña contra el turismo impacta directamente a ellos porque el sector estatal cuenta con 1.2 millones de canadienses como base para sus hoteles y restaurantes. Una gran parte de los turistas estadounidenses iban al sector privado por lo que el golpe está siendo muy duro, para ellos ésta ha sido la peor temporada baja en muchos años. Los emprendedores están ahora bajo el fuego cruzado de Washington y de los inmovilistas cubanos que los miran con desconfianza, como si fueran un caballo de Troya intentando penetrar la Plaza Sitiada.

COHA ¿Qué papel han tenido los congresistas cubano-americanos en este proceso? ¿Quién está dictando esta doctrina de retroceso en el gobierno estadounidense?

Ravsberg Da la impresión de que el Senador Marco Rubio, de origen cubano, es la pieza clave de la radicalización de Trump en el tema Cuba. Rubio es miembro del grupo que investiga algunas tramas que acusan a colaboradores del Presidente e incluso salpican su figura. A pesar del encono mutuo que mostraron ambos políticos durante la campaña de nominación, hoy el Senador es el principal defensor del Presidente y éste convierte en política todas las propuestas de Rubio sobre Cuba. Por eso muchos creen que se trata de un intercambio de favores.

COHA ¿Qué pretende lograr el gobierno de Trump al ejercer esta nueva estrategia?

Ravsberg Yo creo que deberíamos preguntar qué pretenden los políticos cubanoamericanos porque esa es su estrategia, no la de Trump, quien incluso envió a sus allegados a investigar las posibilidades de hacer inversiones en Cuba. Podría tratarse de una estrategia de cerrar todas las válvulas de escape para aumentar la presión y hacer explotar la olla. Desde hacía un par de años Rubio intentaba acabar con la política migratoria de “pies secos-pies mojados” para cortar la migración de cubanos. Obama fue quien dio ese primer paso –paradójicamente también reclamado por La Habana- y ahora Trump termina de cerrar el nudo dejando de entregar visas a los cubanos, con la excusa de tener falta de personal. Buscan además boicotear el turismo en la isla que se mostraba como la industria de mayor crecimiento y a la que se podían enganchar otros sectores económicos, incluso los trabajadores por cuenta propia y sus empleados. Ahora todo se decide dentro del país, las válvulas que regulan la presión se acaban de cerrar y los inmovilistas dentro del gobierno cubano siguen aumentando el fuego. Si algo no cambia podría provocarse una explosión social, objetivo final de los políticos anticastristas. Es la misma estrategia de los 60 -plasmada en un documento del Departamento de Estado- crear hambre, miseria y desesperación en la población cubana para provocar un alzamiento popular contra la revolución. El gobierno de Cuba ante estos cambios ha reaccionado diplomáticamente, indicando que continúe el proceso de normalización que comenzó con la presidencia de Obama.

COHA ¿Cómo cree que ha cambiado la estrategia del gobierno cubano ante estos nuevos obstáculos? ¿Desde su punto de vista, cuál es la meta a la que quiere llegar el gobierno cubano con estas negociaciones?

Ravsberg El gobierno cubano pretende la normalización de las relaciones con EEUU, ya que eso representa el fin del embargo, la devolución de la base militar y el cese de la persecución internacional de la OFAC. Tendrían que ser dementes para pretender prolongar en el tiempo este enfrentamiento. Sin embargo, creen que con EEUU no se puede ceder porque cuando se entra en ese camino, estás perdido. Es la estrategia negociadora de los vietnamitas: no dar nada a cambio de aquello que reclaman como un derecho, como la independencia, por ejemplo. Sadam no lo comprendió, cedió, cedió, cedió y al final lo invadieron de todas formas. El gobierno cubano no va a propiciar cambios internos para ganarse la buena voluntad de Washington. Ya una docena de presidentes probaron esa vía y fracasaron estrepitosamente, provocando únicamente una mayor radicalización del proceso cubano. La confrontación no parece la elección del gobierno de Raúl Castro ni de los dirigentes que lo sucederán pero tampoco le temen. No se trata de algo nuevo con el que no sepan lidiar, sino de un enfrentamiento en el que se manejan muy bien y exitosamente. El futuro presidente cubano y la generación que lo acompaña nacieron en medio de esa confrontación, no conocen otra cosa. Hoy podríamos estar acercándonos otra vez a una situación similar a la del inicio de la Revolución, como si la historia cerrara un círculo. Cuba muy endeudada, con parte de la infraestructura destruida por el huracán, sin dinero, perdiendo sus fuentes de petróleo y con el enfrentamiento con EEUU a la vista. ¿Volverá a la órbita rusa, estrechará sus relaciones con China o ambas cosas?

COHA Ahora, quiero dirigirme hacia el tema de las elecciones en Cuba y cómo una nueva directiva isleña puede o no cambiar el rumbo de las negociaciones.

Ravsberg En cualquier parte del mundo es difícil saber qué piensan realmente los políticos antes de que asuman el mando y Cuba no es una excepción. Sin embargo, en el nuevo gobierno no hay figuras desconocidas, todos los integrantes tienen una larga historia de militancia dentro del Partido Comunista, la mayoría incluso desde adolescentes. Mi impresión es que la línea política se mantendrá pero se acelerarán los cambios económicos. La presencia de los históricos (entre los que hay algunos inmovilistas) en la dirección del PCC les mantiene el poder sobre las líneas generales de la política cubana, pero su salida del gobierno les resta capacidad de frenar los cambios. En cuanto a la relación con EEUU, creo que se mantendrá la misma política histórica de acercamiento en igualdad de condiciones, sin imposiciones ni exigencias que afecten la soberanía nacional, razón fundamental de la rebelión de la generación de Fidel Castro. No creo que acepten realizar cambios políticos para ganarse las simpatías de Washington porque pocos confían en que este procedimiento funcione.

COHA Hasta ahora sabemos que Miguel Díaz-Canel, Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros es el candidato con más probabilidad de ser elegido el próximo presidente de la isla. ¿Qué sabemos de su doctrina para tener en cuenta la dirección que tomará con respecto a la continuación del diálogo con el gobierno norteamericano?

Ravsberg Es un político que demostró ser capaz en las provincias que dirigió. Viene de la escuela guevarista de austeridad y esa ha sido su bandera desde que asumió la jefatura del PCC en la provincia de Villa Clara. Siendo el primer secretario de esa provincia, andaba en bicicleta, hacía cola en las pizzerías y vestía de forma muy sencilla. MDC, fue el defensor de los derechos de la comunidad LGBTI, al grado que en Villa Clara nace el primer centro cultural integrado, donde travestis y gays comparten con el resto de la población. Los travestis podían vestir de mujer sin que nadie los molestase mientras en La Habana eran detenidos por la policía acusados de escándalo público. Durante su gobierno en Villa Clara surge un potente movimiento de rockeros y se realizan los primeros festivales de tatuajes, dos sectores muy mal vistos por las autoridades del resto del país. Es un político familiarizado con las TICs, el primero que abre una laptop en un consejo de ministros. Puede que sea un continuador político de los líderes históricos pero sin duda pertenece a otra generación con características muy diferentes. Respecto al diálogo con EEUU creo que estará tan abierto como lo estuvo Raúl Castro, el problema es que pueda aparecer en EEUU otro Obama con el cual dialogar. No creo que acepte hacer concesiones a Washington a cambio de un acercamiento, pero no por un problema ideológico sino práctico que ya expliqué antes. Además de que el tema de la defensa de la soberanía nacional es algo que la revolución sembró en la mayoría de los cubanos, en particular en sus políticos.

COHA ¿A dónde cree que empujen las corrientes ideológicas internas de la cúpula del gobierno cubano después de que Raúl se retire, a una normalización u otro camino, dado que el gobierno de Trump ha mostrado que no está interesado en una normalización completa?

Ravsberg En realidad, es imposible hacer futurismo en el tema cubano. Recuerdo un colega que escribió un libro llamado “La hora final del Fidel Castro” y ya pasaron 25 años de esa predicción.

 

COHA En acorde con el resultado del análisis del gobierno norteamericano, los síntomas de sus diplomáticos en la embajada de la Habana fueron ‘ataques sónicos.’ ¿Cree usted que Cuba emplearía este tipo de acción en contra de funcionarios extranjeros en suelo nacional? ¿Tiene Cuba un arma de este tipo?

Ravsberg Realmente parece una película de James Bond y sus extrañas armas. En primer lugar, no se conoce ningún arma acústica que sea capaz de atacar con semejante precisión, en principio por impedimentos de la física, explicados por el NYT hace unos días. ¿Por otra parte qué sentido tendría iniciar un acercamiento con EEUU y después sabotearlo? Recordemos que el primer caso denunciado fue durante el gobierno de Obama. Si hubieran querido sabotear el diálogo, para el gobierno cubano sería más fácil poner como condición que levanten el embargo o que devuelva Guantánamo. Además, se habla de ataques acústicos sin decir el nombre de las víctimas, sin mostrar ningún examen médico que los confirme y hablando de un arma que nadie conoce que exista. Para creer en una acusación planteada en estos términos, habría que tener más fe en los políticos que la que se tiene en Dios. Por último, hay que recordar que las primeras denuncias de daños acústicos vienen de espías radicados en la embajada de EEUU en La Habana. Y cuando entra en la ecuación la CIA o cualquier otro servicio de espionaje del mundo, todo es engaño. “Si no hay víctima, no hay arma, no hay confirmación de los daños, ni hay motivo, pues no hay caso”, diría cualquier juez de un tribunal de cualquier parte del mundo.

COHA Los Estados Unidos no han culpado a Cuba por los ataques, pero si han usado el momento para retractar varias de las pólizas de la era de Obama. ¿Está el gobierno de los Estados Unidos tratando por métodos ilícitos de obtener apalancamiento sobre Cuba mediante estos hechos y forzar a la isla por varios caminos de aceptar sus términos en la ‘normalización’?”

Ravsberg Marco Rubio parece estar presionando para dar marcha atrás sin excusas, pero Trump y su equipo de gobierno intentan hacerlo de forma más “política”. Se permite a las aerolíneas continuar operando, pero se trata de reducir el turismo para que no les sea rentable. No reniegan del acuerdo migratorio, pero vacían el consulado dejándolo sin capacidad de otorgar las 20 mil visas comprometidas. No se cierran las puertas, pero se dan pasos para que estas se cierren por su propio peso.

 

Escrito por R. O. NiederstrasserAnalista del Consejo de Asuntos Hemisféricos

Apoyo editorial adicional proporcionado por Francisco Ugas, Becario de Investigación, María Alejandra Silva Ortega y María Rodriguez-Dominguez, Analistas del Consejo de Asuntos Hemisféricos

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Imagen: Fernando Ravsberg                                                                                   De: Tomado por Fernando Ravsberg